Lo primero que debes saber es que Home Office o Trabajo en Casa no es una tendencia nueva, éste venía en crecimiento antes de la pandemia, influenciado por nuevos modelos de negocio o trabajo de grandes empresas, entre ellas: Google.

De la mano del Home Office comenzó a tomar fuerza el coworking, en donde muchas   empresas sin infraestructura física utilizan estos espacios como centro de reuniones y negocios y en el día a día se ejecutan las tareas desde casa.

La oficina o trabajo en casa tomó fuerza con la pandemia, donde muchas empresas por las medidas restrictivas a largo plazo se vieron obligadas a continuar sus actividades de manera virtual. Con el paso de los días comenzaron a verse los resultados positivos, evidenciando que sí se podía trabajar a distancia, que había rendimiento y no tenía que existir la presencialidad para que muchas compañías funcionaran.  

De esta manera se empezaron a transformar los espacios que inicialmente se habían adecuado para ello: el mobiliario y todo lo que rodea este entorno.  

“Al comienzo de la pandemia las compañías que diseñamos mobiliario desarrollamos productos económicos y sencillos que fueran fácil de adquirir en masa, porque nunca se pensó que ésta se fuera a alargar tanto. En ese entonces, salieron al mercado escritorios que se podían adquirir fácil y se adecuaban a cualquier punto de la casa, pero al prolongarse la cuarentena cambió el panorama y con él, el entorno y el mobiliario de estos espacios”. Explica Andrés Felipe Maya.

Cuenta, además, que los cambios se empezaron a dar con la búsqueda de zonas más adecuadas dentro de la casa para evitar la contaminación visual o auditiva y poder ejercer con responsabilidad esta labor. Así mismo, cambió el concepto de comprar un escritorio convencional y se pasó a elegir uno que se adecuara a las necesidades, con diseño a la medida, espacios personalizados, decorados e integrados.

De esta manera aparecen otros elementos. Lámparas para mejorar iluminación, biombos o divisores de espacios, superficies para trabajar cómodamente y a su vez archivar o guardar el material de trabajo.

En cuanto a “la silla adecuada para este espacio”, se suma un componente estético al Home Office, ya que normalmente una silla de escritorio no encaja en la decoración o ambiente de hogar, por lo tanto, el mercado comenzó a ofrecer sillas de estudio y trabajo con más diseño, ergonomía y descanso. “No es lo mismo cuando se elige un mueble para la oficina, donde solo importa la comodidad y ergonomía, pero cuando está en la casa se busca que adicional a ello sea estético», apunta el ingeniero Andrés Maya.

¿Cómo adaptar tu oficina en casa?

Consultamos cuáles son los aspectos más importantes para tener un espacio adecuado de trabajo o estudio en casa. Acá les compartimos cinco claves:

1. Elige un espacio que te brinde concentración: Trabajar o estudiar en el comedor o en la sala de la casa, donde llegan o se reúnen todos los miembros de la familia, puede convertirse en un dolor de cabeza. Allí no habrá tranquilidad y mucho menos concentración. Lo ideal es que identifiques un espacio que te permita tener la intimidad laboral que necesitas. Puedes dividirlo con un biombo, lo importante es que realmente sea tu espacio de trabajo, que sea cómodo, agradable y no tengas que estar yendo de un lugar a otro.
2. La iluminación es clave ¿Sabías que la iluminación influye en la productividad laboral? Contar con un espacio iluminado aporta a la concentración, al descanso visual y un mejor ambiente laboral. Por ello, a la hora de organizar tu oficina en casa, elige un espacio que te brinde, sí es posible iluminación natural, de lo contrario en el mercado ofrecen lámparas para este tipo de espacios y necesidades a muy buen precio.
3. Abre las ventanas o enciende el aire. La condición ambiental en la que trabajas es esencial. Se necesita aire para no sentirnos encerrados todo el tiempo en una casa y evitar sentir la claustrofobia que puede generar el encierro en este lugar. La calidad del aire que tengas en el ambiente en el que trabajas también aporta a la concentración y productividad. 
4. Personaliza tu espacio. Ponle tu sello, organizarlo a tu gusto, elige los colores adecuados para las paredes, la decoración que te motive, los difusores y las velas son un apoyo para la concentración y la tranquilidad. El escritorio es indispensable, si puedes hazlo a tu medida, no olvides que la silla debe ser cómoda y ergonómica,
5. ¡Aprende a poner límites! Crea rutinas, establece horarios y tareas diarias. Recuerda, además, hacer pausas activas, tomar agua, caminar y estirar tus músculos.